Hace exactamente 4 años, 11 de noviembre de 2013, publicaba en este mismo blog un post dedicado a la jornada electoral en la Hermandad de la Macarena en el que además de contarte los resultados y lo acontecido, expresaba mi enhorabuena a Manuel García García, tras haber resultado elegido Hermano Mayor con 1.857 votos frente al otro candidato, Agustín Bello-Conde Valdés con 1.010.
Mañana 12 de noviembre de 2017 los hermanos y hermanas de la Macarena tenemos la palabra nuevamente y con nuestro voto elegiremos un nuevo Hermano Mayor y Junta de Gobierno de entre las dos candidaturas que concurren a estos comicios: Santiago David Álvarez Ortega y José Antonio Fernández Cabrero.
Unas elecciones que vienen precedidas de una intensa e interesante campaña, juzgada y valorada por propios y ajenos, que ha llenado muchas horas de radio, prensa, televisión y, por supuesto, comentarios y opiniones en las principales redes sociales, a veces impropias de quienes decimos sentirnos macarenos. Una campaña en la que ambos candidatos han puesto toda su carne en el asador, ofreciéndonos sus programas y proyectos, que servirán de base para que mañana, desde la libertad que nos asiste, podamos introducir la papeleta en la urna optando por la candidatura que a nuestro juicio reune a las mejores personas y propuestas para llevar el gobierno de la hermandad durante los próximos cuatros años.
Por eso hoy, precisamente hoy, quiero hacer un acto de justicia y a la vez de agradecimiento a la persona de Manuel García, quien mañana entregará su testigo al Hermano Mayor electo cercana la media noche.
Gracias Manuel García por estos ocho años en los que has estado al frente de la Hermandad, ocho años que no han sido fáciles por múltiples circunstancias, pero que estoy convencido de que en tu interno podrás sentirte satisfecho pues nadie podrá dudar de que tu gestión siempre ha sido teniendo presente a quienes formamos parte de la corporación, desde tu corazón macareno, con muchos aciertos y escasos errores, pues nadie es infalible, salvo el Señor de la Sentencia a quien profesas tu amor y devoción junta la Santísima Virgen del Rosario y de la Esperanza Macarena.
Gracias también, Hermano Mayor, por legarnos esta cantera de oficiales que hoy forman parte de una y otra candidatura. Tu apuesta por ellos nos permite hoy poder optar bien por el que ha sido tu Teniente de Hermano de Mayor o bien por Consiliario de Asistencia Social. Uno representando la continuidad de tu trabajo y de quienes te precedieron, junto a nuevos proyectos y actuaciones de cara al futuro. Y otro, novedoso, pero también con propuestas y compromisos concretos, igualmente al servicio de la Hermandad.
Gracias, Manolo, por haber sabido y querido estar al margen de esta “disputa” electoral. Por tu imparcialidad (al menos pública), por haber dejado el protagonismo a otros y por haber seguido trabajando a favor de la hermandad mientras otros prestábamos más atención a lo que se “cocía” en torno a ambas candidaturas.
Gracias, de todo corazón, por haber mantenido siempre abierta la puerta de tu despacho cuando te he necesitado, por escucharme, por haberte preocupado por mí y por tus palabras de cariño y Esperanza en esos momentos en los que tú y yo sabemos no han sido fáciles para mí.
Gracias, en definitiva, por demostrarme que no me equivocaba cuando te di mi apoyo hace cuatro años, del mismo modo que espero no equivocarme votando a favor de Santiago Álvarez, quien si los hermanos quieren, estoy convencido de que será el perfecto sucesor tuyo para representar a nuestra querida hermandad.
Que Nuestro Padre Jesús de la Sentencia, Nuestra Señora del Rosario y María Santísima de la Esperanza Macarena sigan cuidando de ti y tu familia y os protejan muchos años.
¡Gracias, Manolo García. Gracias Hermano Mayor. Un abrazo lleno de Esperanza!
