18 abril 2012

Bendición de Nuestro Padre Jesús Despojado de Salamanca (I)

Estaba en deuda con muchos de vosotros que me habíais pedido que publicara todo lo relacionado con la Bendición de la Imagen Titular de Nuestro Padre Jesús Despojado de sus vestiduras de Salamanca, de la que como muchos sabéis he sido Hermano Mayor hasta hace pocas fechas (pero este no es el tema ni el sitio para hablar de esto). Por tanto, y gracias a un montón de grandes amigos, de buenos fotógrafos, os voy a ir mostrando todos y cada uno de momentos intensos, esperados, soñados y que forman parte del recuerdo pero que están muy presentes en mi corazón.

Aunque ya es sobradamente conocido, la Bendición Solemne tuvo lugar en la Iglesia de la Purísima en la tarde del 11 de Febrero de 2012; un acto eminentemente litúrgico, con criterios absolutamente diocesanos y que contó con la presencia y el cariño de muchos fieles, de amigos, de cofrades de muchas partes de España y Salamanca... en definitiva, una autentica manifestación de fe, que D. Florentino Gutierrez, el Cuarteto Arpeggione, el Grupo Musical Diocesano y unos padrinos y madrinas de excepción, la Hermandad de Jesús Despojado de Sevilla y las Hermanitas de los Pobres de Salamanca, consiguieron que la emoción estuviese presente a lo largo de la hora larga de duración de la ceremonia. A su conclusión la Sagrada Imagen fue trasladada por los hermanos costaleros a la sede canónica de la Hermandad, la Iglesia de San Benito.

Para terminar, he querido dejar una mención especial para él, para quien ha sido capaz de plasmar con sus manos, su arte, su particular y singular estilo, su realismo,.. una obra que ya es más que eso, es El, que se despojó de todo rango para convertirse en uno mas y entregar su vida para salvarnos. Mi gratitud, mi admiración, mi cariño y mis respetos, para un amigo de los de verdad, D. Francisco Romero Zafra, quien cumplió con creces su promesa de dotar a la Semana Santa salmantina de una Imagen que fuera un perfecto y auténtico medio para canalizar nuestra fe.











































Y, por supuesto, mi agradecimiento a Víctor L. Gómez, por permitirme la publicación de este precioso reportaje, que espero os haya gustado. (Prohibida la reproducción de las mismas sin permiso del autor o del  Blog)