Una cita a la que no suelo faltar y participar, salvo por razones de tiempo o por atender otras obligaciones personales, es la Fiesta Sacramental en la Octava del Corpus que la cofradía más antigua de Salamanca - la Vera Cruz - organiza cada año.
Una festividad que la Ilustre Cofradía gusta de compartir con otra hermandades "vecinas" como la del Santísimo Cristo de la Agonía o la de Jesús Despojado. Su colaboración es distinta, pero cargadas de gran espiritualidad y simbolismo.
Al altar instalado en el Humilladero del Campo San Francisco por la propia Vera Curz, se suma el que con sumo gusto y un trabajo de equipo, montan los hermanos de Jesús Despojado junto al Convento de las RR.MM Adoratrices. Y, por su parte, el Convento de la Anunciación (Las Úrsulas), sede canónica de la Seráfica Hermandad del Cristo de la Agonía, es el espacio elegido para hacer Estación y ofrecer nuestras oraciones al Santísimo.
En definitiva, y para dejarte que disfrutes del reportaje gráfico de Heliodoro Ordás, unas cuantas notas para completar este post. A las 12:00 dio comienzo la Eucarísta en la Capilla de la Vera Cruz (si vienes por Salamanca, te recomiento su visita, ya no solo por su estilo barroco con reminiscencias renacentistas, sino por la paz interior que se respira nada más atravesar la pequeña puerta que da acceso). A continuación tuvo lugar la Procesión con el Santísimo que, partiendo de la propia Capilla, discurrió por las cales de Domínguez Berrueta, Agustinas, Bordadores, Paseo de las Úrsulas, regresando de nuevo a la Vera Cruz,donde se finalizón con la Adoración al Santísimo y la Bendición Final.