22 agosto 2012

Visita al taller de Ana Rey y Ángel Pantoja - Agosto 2012


Hay veces que prometemos cosas que con el tiempo no somos capaces de cumplir. Pero desde hace meses, antes de la pasada Cuaresma tal vez, tenía el compromiso de devolver una visita a dos grandes personas, entrañables amigos y especiales a la hora de transmitir todo el arte gaditano que llevan dentro.

Y el pasado martes (21 de Agosto) el Señor quiso que esa promesa se materializase y diese con el taller que en la calle Diego Niño 14 de El Puerto de Santa María tienen Angel Pantoja y Ana Rey, o lo que es lo mismo, Ana y Ángel.

Mi relación con ellos nace desde mi cercanía al trabajo de Ana.  La Dolorosa de la Hermandad de las Aguas (Cádiz), sus dibujos, pinturas, etc. no pasaron desapercibidos para mí, de ahí que no dudé en contactar con ella. Nuestra amistad y su arte, profesionalidad y calidad de sus trabajos fueron ingredientes suficientes para que en su día propusiese a la Hermandad de Jesús Despojado de Salamanca que ella fuese la persona elegida para plasmar en un lienzo el cartel de la Bendición del Señor de San Benito y el posterior de la primera estación de penitencia de la hermandad del pasado Domingo de Ramos salmantino. No voy a descubriros cosas que pertenecen al ámbito exclusivo de la Hermandad y de Ana Rey, pero si he de manifestar que toda la valía en la calidad de sus obras es de igual magnitud a la generosidad de su corazón.


Y a través de Ana Rey uno llega a Ángel Pantoja. En su visita pasada a Salamanca, y tras compartir con ambos un bonito fin de semana, no solo descubrí al profesor de Escultura de la Academia de Bellas Artes de El Puerto de Santa María, al imaginero, al apasionado por la fotografía… sino también a una persona extremadamente afable, cariñosa y siempre dispuesta a ofrecer sus conocimientos y a compartirlos.

Tanto de una como de otro, existe amplia información en la red sobre sus trabajos, bien en sus páginas personales (http://www.anarey.es/ http://www.angelpantoja.com/  así como en las redes sociales, por lo que prefiero dedicar mis palabras a lo que viví y sentí  a lo largo de las más de dos horas de visita a su taller.

Decirte que él se respira sobre todo actividad, responsabilidad”  y mucha ilusión. Dicho con todos los respetos hacia ambos, creo que forman un “tandeen” perfectamente equilibrado en todos los sentidos, lo que a priori se me antoja como una garantía de éxito tanto en lo personal como en lo profesional.

María Santísima de Caridad y Esperanza, para la Asociación Parroquial de la Santa Cruz de Ronda (Málaga) es la obra que Ana Rey está finalizando, imagen de Gloria que será bendecida el próximo 14 de septiembre.  (http://santacruzronda.jimdo.com/).  Otra Dolorosa para Dos Hermanas (Sevilla),  una imagen de la  Inmaculada para una Residencia de Ancianos de Málaga, otra imagen de Poncio Pilatos para el misterio del Ecce Homo de Barbate (Cádiz) etc. completan parte del trabajo que en el que ocupa el tiempo Ana en estos momentos.

Por su parte Ángel está volcado conjuntamente con Ana en el misterio que representa el Lavatorio de los pies en la Última Cena, para la Agrupación Parroquial San Juan el Grande de Jerez de la Frontera (http://lavatoriodepiesdejerez.blogspot.com.es/), asi como en los trabajos de restauracion de Nuestra Señora de la Soledad de El Puerto de Santa María, habiendo entregado recientemente una imagen de Santa Ana para la Iglesia de Santo Domingo de Cádiz y la Virgen del Amor en Jedula. Todo ello complementado con sus enseñanzas tanto en el propio taller como en la citada Academia de Bellas Artes,


En definitiva, una bonita mañana de reencuentros, de intercambio de momentos y situaciones pasadas, de proyectos e ilusiones, de mucho ver y escuchar pero, sobre todo, de admiración y cariño hacia estos dos jóvenes que ya poco tienen de promesas, pues sus obras son testimonio de su valía contrastada. Quién sabe lo que les deparará el futuro y si algunos sueños que hace tiempo compartimos podrán llegar a materializarse... No me extiendo más, salvo para dar las gracias a Ángel y a Ana por su hospitalidad, por su cariño y por su disposición hacia mi persona, antes como hermano mayor de la Hermandad de Jesús Despojado de Salamanca y ahora como un cofrade, amigo y macareno que les quiere y admira. Mucho éxito a ambos en todas las facetas de la vida y espero que nos veamos pronto, si puede ser ante el Señor de Romero Zafra en Salamanca.

Te dejo con unas cuentas fotografías que complementan este artículo y que fueron tomadas por el propio Ángel Pantoja para su publicación en el blog.