La
Esperanza del cristiano se basa en las promesas de amor que Dios nos ha dejado
a lo largo de la historia. Cuando leemos la Biblia, podemos oír a Dios
hablándonos al corazón. Y lo que leemos en la Biblia nos da esperanza.
Confiamos en Dios, pues Él nos ha prometido que su voluntad es siempre buena
para nosotros, ya que nos ama infinitamente, Él jamás nos falla.
Sobre la Esperanza,
el Papa Francisco dijo: "La Esperanza es la virtud del corazón que no se
cierra en la oscuridad, no se detiene en el pasado, sino que sabe ver el
mañana... Dios no defrauda: si ha puesto una esperanza en nuestros corazones,
no quiere destruirla con frustraciones continuas. Todo nace para florecer en
una eterna primavera. Dios nos hizo para florecer".
No debemos permitir que las dificultades nos roben la Esperanza. Afrontemos cada situación pensando que es un nuevo reto que Dios nos ha permitido tener para que de ella saquemos lo mejor de nosotros. No nos detengamos, no nos desanimemos, Dios es nuestra Esperanza para siempre.
Que la oración, alma de la Esperanza, sea luz en la oscuridad de quienes necesitan despojarse del dolor y el sufrimiento que les invade ante las pruebas que la vida nos presenta. Mis oraciones para ti, Oscar Rodríguez Fernández, que has partido al encuentro del Señor y para toda la familia, especialmente para tu mujer, Mariam, y para tus hijos, Oscar, Soraya e Izan.