Señor Jesús, has sido despojado de tus vestiduras, expuesto a la deshonra, expulsado de la sociedad.
Te has cargado de la deshonra de Adán, sanándolo.
Te has cargado con los sufrimientos y necesidades de los pobres, aquellos que están excluidos del mundo.
Pero es exactamente así como cumples la palabra de los profetas.
Es así como das significado a lo que aparece privado de significado.
Es así como nos haces reconocer que tu Padre te tiene en sus manos, a ti, a nosotros y al mundo.
Concédenos un profundo respeto hacia el hombre en todas las fases de su existencia y en todas las situaciones en las cuales lo encontramos.
Danos el traje de la luz de tu gracia.
Te has cargado de la deshonra de Adán, sanándolo.
Te has cargado con los sufrimientos y necesidades de los pobres, aquellos que están excluidos del mundo.
Pero es exactamente así como cumples la palabra de los profetas.
Es así como das significado a lo que aparece privado de significado.
Es así como nos haces reconocer que tu Padre te tiene en sus manos, a ti, a nosotros y al mundo.
Concédenos un profundo respeto hacia el hombre en todas las fases de su existencia y en todas las situaciones en las cuales lo encontramos.
Danos el traje de la luz de tu gracia.
Padre nuestro,
que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.