Bajo tu manto me acoges
Tú que sabes cuánto te quiero
y a pesar de mis pecados
me dejas ser tu costalero
Maniatado te me ofreces
Cristo Moreno de San Gil
¿Quién soy yo para pedirte
que te apiades de mi?
Un altar para ti, Madre,
Gloria de los macarenos,
donde postrarnos a tus pies
Reina y Señora de los Cielos
Un Padrenuestro y diez Avemarías,
una mirada a tu regazo
¡Ay Madre Mía que hermosura!
el Niño dormido en tus brazos
Dieciséis años han pasado
desde que acudí a tu
llamada
para llenar mi corazón de Esperanza
y sentir tu amor en la mirada
Déjame decirte Mujer
que tus lágrimas son mis penas
y tu luto mi dolor
mi Esperanza Macarena
Muchas gracias Pilar por dar vida a mis textos con tus fotografías.